Descripción
El interior, trata de explicar el potencial lector dentro de sus páginas en donde siguen los pasos de un hombre solo a bordo de su coche bautizado Erre, a lo largo de catorce provincias llenas de paisajes, de personas, de teorías sólidas o antropología de barra (según), de conflictos e historia y tentadoras metáforas chuscas. De economía y belleza y bustos de malos padres de la patria. Tal vez, la reseña puede preguntarse, suspicaz, si un país puede caber en un libro cuando éste renuncia a visitar su mascarón de proa, la capital, Buenos Aires; pero es que nada hay más presente en este libro que Buenos Aires, esa pared en la que todo rebota.
La mirada de Caparrós, divertida, ácida, tiene su displicencia, su sarcasmo: puede que eso sea un sello capitalino, pero también de escritor ilustrado. Es un sarcasmo consciente, combativo, que muda de pronto en ternura. La mirada izquierdista de Caparrós: antitelúrica, coherente. El mejor interlocutor de Caparrós es Caparrós mismo: qué memorables pasajes preguntándose cómo contar, cómo escribir, cómo mirar. Y luego, algo importante: El interior es un libro que alienta y quiebra el estereotipo constantemente, no tanto simultánea como alternadamente.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.